Artritis reumatoide

¿Qué es la artritis reumatoide?

Es un trastorno inflamatorio crónico (duradero). Causa hinchazón y dolor en el revestimiento de sus articulaciones. Puede afectar otras partes de su cuerpo, como el revestimiento de su corazón y pulmones.

Síntomas

La artritis reumatoide generalmente ocurre primero en las manos, muñecas, pies y rodillas. Puede afectar varias articulaciones al mismo tiempo, en ambos lados de su cuerpo. Por ejemplo, pueden dolerle ambas muñecas y estar rígidas. Las articulaciones de los dedos de las manos y los pies pueden ser algunos de los primeros lugares que presentan dolor y rigidez

La artritis reumatoide puede incluir uno o más de los siguientes síntomas:

  • Articulaciones dolorosas e hinchadas, especialmente en manos, pies y rodillas
  • Dificultad para mover los pies
  • Rigidez y dolor en las articulaciones, especialmente después de dormir
  • Fiebre
  • Fatiga
  • Manos rojas hinchadas
  • Bultos duros (llamados nódulos reumatoides) justo debajo de la piel cerca de las articulaciones
  • Pérdida del apetito

Factores de riesgo

Los factores que pueden aumentar el riesgo de padecer artritis reumatoide incluyen:

  • El sexo: Las mujeres son más propensas que los hombres a desarrollar artritis reumatoide.
  • Edad: se puede producir a cualquier edad, pero más frecuentemente comienza a mediana edad.
  • Antecedentes familiares: Si un familiar padece artritis reumatoide, el riesgo de que padezcas la enfermedad puede ser mayor.
  • Sobrepeso: Las personas que tienen sobrepeso presentan un mayor riesgo de desarrollar artritis reumatoide.

Recomendaciones

  1. Reducir los episodios de estrés y una gran actividad física
  2. Evitar trabajos que impliquen un movimiento repetitivo de las articulaciones, especialmente de las manos
  3. Evitar realizar una fuerza excesiva con las manos en el día a día (por ejemplo, abrir tapaderas de rosca)
  4. Sentarse en una posición recta y evitar permanecer con la espalda y cuello doblados durante largos periodos de tiempo
  5. Dormir entre ocho y diez horas diarias. Se recomienda, además, que el colchón sea duro y la almohada baja.